Homenaje a la Memoria de Mercedes Fernández “La Serneta”

La edición número 8 del Potaje Gitano se dedicó a la memoria de Mercedes la Serneta. Y aquí, cuando todos suponíamos que en este Potaje se levantaría un monumento a la soleá, el artista que más brilló, demostrando su capacidad y su conocimiento, fue Enrique Montoya. Esto no podía sorprender a nadie, porque todos éramos conscientes de la verdad artística de Enrique. Cantó y fue extraordinario acompañante, con su guitarra, a los cantes profundos de Juan Talega y perfectos y maestros de Antonio Mairena.

Biografía

María de las Mercedes Fernández Vargas, “La Serneta”, (Jerez  1837 – Utrera 1912), llegó a Utrera en 1863. Aquí creó su soleá “apasionada y dulce” como la llamaba Fernando el de Triana, que hoy día se conoce con el nombre de la “Soleá de Utrera”.

La Serneta está reconocida como la mejor “solearera” del siglo XIX e incluso de la historia del flamenco. Mostró su arte, sobre todo, en reuniones privadas, aunque también actuó en algunos de los cafés cantantes mas renombrados de la Sevilla de la época, un periodo de esplendor y desarrollo del Arte Flamenco.

La Serneta era cantaora y guitarrista, toda una excepción en el panorama flamenco femenino. Nunca llegó a grabar discos, así que el conocimiento que tenemos de ella es a través de terceros, que recogieron parte de su legado. Además, en aquellos tiempos, los cafés no estaban muy bien vistos por la prensa y los críticos flamencos, por esto, estas artistas tenían ciertas dificultades para llevar una carrera profesional normal, y ha influido en el hecho de que hoy día no contemos con referencias directas de su actividad.
La llegada de la Serneta a Utrera coincide, mas o menos, con el nacimiento de tres figuras esenciales de la historia del Flamenco de Utrera: Juan Moreno Jiménez “Joaniquí”; Fernando Peña Soto “Pinini”; y Rosario Torres Vargas “Rosario la del Colorao”.

El cante de la Serneta, considerando así a la soleá de Utrera, ha sido cultivado por muchos intérpretes como Rosario la del Colorao, El Pinini, María Peña, Fernanda de Utrera, Juan Breva, D. Antonio Chacón, Manuel Vallejo, Pastora Pavón y Tomás Pavón.